jueves, 25 de octubre de 2007

Francia toma medidas contra el cambio climático

- Sarkozy insta a Bruselas a aplicar una ecotasa frente al cambio climático.
- Anuncia que Francia gravará los productos contaminantes y premiará los que no lo son.
- La medida se compensará reduciendo las cargas que gravan el trabajo.
- Los impuestos de los coches se calcularán en función del nivel de emisiones de CO2.

El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, ha instado a la Comisión Europea a que estudie "muy rápidamente" la aplicación de un impuesto a los productos importados de países que no respeten el Protocolo de Kioto sobre reducción de emisiones causantes del "efecto invernadero".

"No es normal que un producto que atraviesa todo el mundo sea más caro que un producto local, porque el precio de su transporte y de su producción no integra sus emisiones de gases de efecto invernadero", argumentó Sarkozy, que propuso que la UE debata esta cuestión en los próximos seis meses.

El dirigente francés ha hecho esta propuesta en el cierre del proceso de concertación para definir la política ecológica en Francia, denominado 'Grenelle del Medio Ambiente', en un acto solemne en el Elíseo en presencia del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y del Premio Nobel de la Paz, el ex vicepresidente estadounidense Al Gore.

Otras medidas ya se habían ido anunciando conforme habían logrado consenso en el proceso de concertación abierto hace cuatro meses entre el Gobierno, asociaciones de todo tipo (en particular ecologistas), sindicatos, patronal, agricultores y representantes de las administraciones locales.

También ha anunciado una tasa para los camiones que usen la red viaria francesa

Entre ellas están la reducción del 50% en el uso de pesticidas, -"si es posible en los próximos diez años", precisó el presidente-, mediante productos de sustitución. En el terreno de la energía, insistió en que Francia no tiene alternativa a la energía nuclear, a la que no piensa renunciar, pero también que su peso relativo deberá disminuir, al igual que el resto de las que utilizan combustibles fósiles.

En concreto, anunció un plan para mejorar en un 20% la eficiencia energética de aquí a 2020 y para superar en ese mismo horizonte el objetivo europeo de un 20% de energías renovables, para lo cual dijo que se invertirán 1.000 millones de euros para investigar en cuatro años. arkozy aseguró que Francia no está retrasada en políticas ecológicas, su "ambición no es estar en la media, sino ir por delante, ser ejemplares".

Sarkozy también ha anunciado una revisión "general" de la fiscalidad que plantea la creación de una tasa que grave el consumo de energía causante del cambio climático, que se vería compensada por una reducción de las cargas que gravan el trabajo.

Para poder aplicar el principio de que "cuando existe un producto limpio, debe ser menos caro que un producto contaminante", pidió la creación de un tipo de IVA reducido para "los productos ecológicos que respeten el clima y la biodiversidad", algo que deberá negociar con sus socios europeos.

En términos generales, su objetivo es "tasar más la contaminación, en particular las energías fósiles, y tasar menos el trabajo", por lo que la creación de un nuevo impuesto modulado en función de las emisiones contaminantes generadas por un producto tendrían como contrapartida una disminución de las cargas laborales "para preservar el poder adquisitivo y la competitividad".

El jefe del Estado francés confirmó que se creará una tasa para los camiones que utilicen la red viaria francesa, con el argumento de que "no hay ninguna razón para que Francia reciba todos los camiones que evitan las carreteras de nuestros vecinos", y el dinero que se recaude se utilizará para financiar los transportes públicos.

Igualmente dio su visto bueno a la 'eco-pastilla' según la cual los impuestos que se pagan a la compra de un coche nuevo estarán modulados en función del nivel de emisiones de dióxido de carbono (CO2) por kilómetro de cada vehículo. Lo que se recaude por los coches más contaminantes servirá para financiar un plan de desguace de los coches antiguos con menos eficiencia energética que debe incitar a la renovación del parque automovilístico.

( Noticia publicada en el diario El Mundo el día 25 de Octubre de 2007 )

1 comentarios:

Víctor Aranda García dijo...

En mi opinión Francia toma la dirección correcta con estas medidas, coherentes y muy razonables. Me da envidia ver como nuestros vecinos franceses han conseguido que sus políticos se pongan manos a la obra...

Por cierto, ¿nadie se ha parado a pensar por qué son tan baratos los productos que vienen de China, a pesar de tener que recorrer tan larga distancia? La respuesta es triste y tiene que ver con salarios miserables e interminables jornadas de trabajo, y con el uso de fuentes de energía barátas para los empresarios pero muy caras para el planeta. Es hora de tomar medidas para evitar estos efectos perversos de la globalización: si queremos COMERCIO GLOBAL, entonces habrá que cumplir una NORMA GLOBAL, como derechos para el trabajador, o tasas ecológicas. ¿No es lógico?