miércoles, 16 de enero de 2008

Una moda peligrosa

La proliferación de los 4x4 en nuestro país durante los últimos años ha sido espectacular, aunque poco han tenido que ver con este auge la potencia o la tracción a las cuatro ruedas de estos vehículos. Se trata en realidad de una moda más, propiciada en parte por el gusto por diferenciarse de los compradores(¿nadie más se ha dado cuenta de lo mucho que tienden a parecerse entre sí los nuevos modelos de casi todas las marcas de coche?) unido a esa falsa sensación de seguridad que transmiten por su aspecto grande y robusto. Así las ventas de los últimos años han sido tales, que han convertido los 4x4 en un atrezzo casi indispensable para el nuevo rico.

Pues bien, según demuestra un estudio publicado por Ecologistas en Acción esta moda de los 4x4 no resulta tan inocua como dejarse patillas, o ponerse una camisa de cuadros, como ya sospechábamos...

4x4 = - Planteta

Ante la creciente presencia de estos vehículos en las ciudades, Ecologistas en Acción ha elaborado un exhaustivo estudio bajo el epígrafe “4x4 = - Planeta”, que viene a demostrar la alta capacidad de destrucción ambiental que poseen estos vehículos. Del informe se desprende que si bien los impactos que ocasionan estos vehículos son comunes a todos los automóviles, el grado de incidencia de los mismos es mucho más acusado en los 4x4.

Los datos son demoledores: En el terreno de las emisiones, la mayoría de los modelos de 4x4 presentan unos niveles de emisión de CO2 muy elevados, generalmente por encima del resto de vehículos. De los 20 modelos más vendidos en el Estado español en 2006, prácticamente todos emiten por encima de los 200 g de CO2/km (según Faconauto, la media de emisiones de los vehículos matriculados en 2006 fue de 152 g/km). En el contexto actual, en el que la contribución del transporte al cambio climático crece de forma imparable, los 4x4 representan una opción totalmente insostenible. Además, y de forma paralela, los niveles de emisión de otros contaminantes atmosféricos son también más elevados, contribuyendo a aumentar las afecciones cardiorrespiratorias y agravando la precariedad atmosférica de las ciudades.

Tampoco se debe desdeñar del impacto directo de estos vehículos en el medio natural, suponiendo un fuerte incremento de la presión sobre entornos que habían sido poco accesibles. Además, es necesario subrayar la degradación que se viene observando en la red de caminos y pistas forestales, que en el caso español equivale a más de 600.000 km.

El estudio desmonta la falacia sobre la “mayor seguridad” de los 4x4. Así, se aportan datos que cuestionan la mayor seguridad de estos vehículos para sus ocupantes. Por ejemplo, en 2003, la Agencia de Seguridad de Tráfico de EE UU informaba de que los todoterreno vuelcan con más facilidad, y en los accidentes por vuelco el índice de mortalidad de los ocupantes era 3 veces mayor en los 4x4 que en los turismos . Al mismo tiempo, se evidencian unas consecuencias mucho más graves en caso de siniestro o atropello, tanto para los ocupantes de los vehículos con los que colisionan como para los peatones. Así, un reciente estudio, llevado a cabo en EE UU, demuestra que un peatón golpeado por un 4x4 de grandes dimensiones tiene el doble de posibilidades de morir que otro atropellado en idénticas condiciones por un turismo de tamaño normal .

La causa de esta concentración de impactos negativos está en la peculiaridad esencial de estos vehículos: mayor volumen, mayor peso y mayor potencia, y, por tanto, un mayor consumo de energía y unas mayores emisiones. De esta manera, los 4x4 se convierten en el icono de la insostenibilidad motorizada. Esto es, en la punta de lanza de un modelo de movilidad basado en el automóvil, cuyas múltiples repercusiones sociales, ambientales y económicas tienen importantes afecciones tanto locales como de ámbito global.

Ecologistas en Acción considera necesario romper con la visión mitificadora que la publicidad utiliza con el único objetivo de vender un tipo de vehículo totalmente innecesario en la ciudad, y muy cuestionable en el campo. Asimismo, es necesario un cambio de percepción sobre los conductores de estos vehículos: lejos de ser representantes del éxito social, no son sino el exponente más claro del despilfarro de recursos y de insolidaridad con el resto del planeta.

El informe termina exponiendo una serie de buenas prácticas y de medidas para las Administraciones, algunas de ellas específicas para los 4x4.

Nota: Este estudio se enmarca dentro de una campaña de ámbito europeoen la que durante los dos próximos años desarrollará diversas actividades y actos públicos para incrementar la conciencia crítica sobre este tipo de vehículo. Campaña relacionada, también, con el proceso legislativo actualmente en marcha en la Unión Europea respecto a las emisiones de CO2 de la nueva flota de automóviles. Ecologistas en Acción considera que la Unión Europea debe establecer un límite obligatorio de 120 g de CO2/km en la nueva flota a partir de 2012, de modo que vehículos tan contaminantes como los todoterreno empiecen a desaparecer de nuestras ciudades.

4 comentarios:

Víctor Aranda García dijo...

En definitiva, sería mejor que antes de comprarnos un tanque de estos nos paramos a pensar si de verdad es la clase de vehículo que necesitamos para ir al trabajo, recoger a los niños del colegio, o irnos a pasar el fín de semana a la playa. ¿No es un capricho demasiado caro para todos?

Anónimo dijo...

¿nadie se ha fijado? yo siempre digo lo mismo : CUANTO MAS GRANDE ES EL COCHE MAS PEQUEÑA PARECE LA PERSONA QUE VA DENTRO

¿por qué sera? ;)

Anónimo dijo...

Por favor, leer el artículo titulado
4x4=16 Crítica ecológica a una campaña ecologista publicado en el blog
http://eduardo.lowenberg.esp.nom.es

Víctor Aranda García dijo...

Lo he leído y es razonable, pero sigo pensando que el nivel de emisiones de CO2 es un buen baremo de comparación, y me parece muy bien que se penalice con impuestos a los vehiculos que más contaminan, y estos contaminan mucho. Por supuesto toda generalización incurrirá en que algunos se vean perjudicados injustamente, como esa bucólica familia de la que habla el artículo que siempre va en bici o transporte público y que sólo usa su 4x4 una vez al mes y siempre en familia: negar que éste sería un caso muy aislado (si es que realmente existe un caso así) sería negar la realidad de la sociedad española actual, en la que estos vehículos son comprados y utilizados de una manera no demasiado ecológica. Es evidente: la mayoría lo usan para lo mismito que usarían un coche "normal", pero contaminando el doble, o el triple. Esto es así, y es lógico e inevitable pues son vehículos que pesan el doble o el triple.

Asi que sigo pensando que no se trata más que de una estúpida moda, fruto de la sociedad caprichosa e inconsecuente en la que vivimos. ¿Que hay cosas peores? Es evidente, pero lo peor no hace bueno a lo malo.

De todas formas recomiendo también que lean el artículo y saquen sus propias conclusiones.